Volvamos los ojos hacia las sociedades nativas y hagámonos un poco mas «indios».
Casi nunca veo la televisión. Pero hace un par de domingos la puse y sorprendentemente vi un programa interesante. Hablaban sobre los zoológicos humanos que había en Bélgica y Países Bajos a principios del siglo XX y hacían una reflexión. ¿Será nuestra sociedad actual tan ignorante de las barbaridades que comete como lo eran estas sociedades de principios de siglo?
Mi respuesta personal es un SI rotundo.
Cuando dentro de 100 años analicen como vivimos nadie entenderá como es posible que vivamos así. La lista de barbaridades que cometemos es muy larga…
Hoy quiero centrarme en una sola barbaridad, la destrucción de los oceános. Y de todas las amezanas que se ciernen sobre ellos hablar de la contaminación por plásticos. Concretamente de mi viaje hacia dejar de ser parte de este problema.
Voy a por el séptimo mes sin consumir plástico de usar y tirar, y quería compatir con vosotros algunos datos que me han motivado a emprender este camino. Algunos los aprendí en mi visita a Canarias en noviembre de 2014, concretamente a Lanzarote, donde conocí a las personas que forman los proyectos: Agüita con el plástico, C.O.U.P y Famara Limpia. Otra parte, de estos datos, la he ido aprendiendo en congresos como Conama o Langaia, leyendo el libro de Oceana, informes como el de Ocean Conservancy, hablando con gente como Manuel Maqueda (www.elplasticomata.com), o con los miembros de asociaciones hermanas junto a quienes hemos constituido la Asociación Española de Basuras Marinas.
¿Sabíais que…?
En 1869 Wesley Hyatt sintetizó el primer plástico, el celuloide. Significó un gran avance, y si no hubiera sido así probablemente no hubieran existido cosas tan maravillosas como el cine.
Poco a poco se fueron descubriendo nuevos polímeros hasta llegar a unas veinte categorías básicas en la actualidad y a las +/- 17.000 variedades de plástico existentes hoy en día.
Se fueron encontrando las más diversas utilidades a este versátil y barato material.
Poco a poco… fuimos sustituyendo todos los materiales naturales.
En un principio parecía lo correcto, incluso un ahorro de recursos…
El plástico, que también ha jugado un papel importantísimo en cosas como la carrera espacial o la medicina, fue el aliado fundamental para crear algo desconocido por aquel entonces: «La cultura de usar y tirar».
La producción mundial de plástico en 1950 alcanzó 1,7 millones de toneladas métricas.
62 años después nuestras modernas sociedades son totalmente plastico-dependientes.
En 2012:
Se produjeron más de 280.000 millones de toneladas métricas de plástico.
El gran problema es que la cultura de usar y tirar, que comenzó en Estados Unidos poco a poco se ha ido extendiendo a escala mundial, y podríamos considerar sin exagerar que un 25-30% de esta producción esta destinada a plástico de usar y tirar. La consecuencia es que estamos vertiendo según datos oficiales unos 10 millones de toneladas de este material NO BIODEGRADABLE directamente a los océanos cada año.
Allí esta matando más de 1millón de aves marinas y 300.000 mamíferos y tortugas anualmente.
Está formando 5 gigantescas manchas en cada giro oceánico (la más grande alcanza un tamaño de varias veces Francia)
También está envenenando la cadena trófica, ya que el plancton y los animales filtradores lo están comiendo.
Lo más grave es que no podemos frenar este vertido ya que es global y nosotros mismos, las personas, nos hemos vuelto también «Plástico-dependientes».
Tampoco podemos recogerlo, ya que una gran parte se hunde (70%), y el resto se fragmenta en pedazos microscópicos. Hoy en día hay proyectos que nos venden el sueño de recogerlo todo, pero aunque pudieramos, ¿Quá haríamos con semejante cantidad de residuos? ¿Cómo podríamos gestionarlos y dónde?
En todas las limpiezas de playas que hago (debo llevar más de 50 este año, ya que es practicamente siempre que voy a la playa) encuentro sobre todo dos tipos de basura:
– Procedente de barcos. Especialmente presente en Galicia (España). (Representa el 20% de la presente en el mar).
– Procedente de nuestros consumo diario. Ya sea a través de emisarios marinos, vías de agua, visitantes de la playa, contenedores que se vuelcan o vuelan, papeleras repletas, desembocaduras de ríos, corrientes marinas…en general de un sistema de gestión de residuos más que deficiente y de una falta de conciencia general. (El 80% de la basura presente en el mar procede de tierra).
En los últimos 8 meses he muestreado personalmente playas de: Canarias (Lanzarote y Fuerteventura), Marruecos (Imsouane, Essaouira, Tagazouth…), Cataluña (Barcelona, El Prat, Badalona, Masnou), Chile (Pichilemu, Maitencillo…), Cádiz (El Palmar, Bolonia, Faro de Trafalgar…), Galicia (Razo, Aviño, San Miro, Doniños…)
Dice el último estudio presentado en Febrero de 2015 en la revista Science (http://www.sciencemag.org/content/347/6223/768) que en una serie de años hasta 2010 vertimos una media de 8,5 millones de toneladas de plástico y que China fue responsable del 30%.
Lo que no dice este estudio es que Estados Unidos, que es el 5% de la población mundial, está produciendo casi el 20% de la llamada «Municipal Solid Waste» (Basura municipal sólida) . Y que los 34 países de la OCDE somos los responsables de producir el 75% de este tipo de basura que es la que fundamentalmente asola nuestros mares.
¿Como es posible entonces que China vertiera tanto?
La respuesta es sencilla, los demás países les estamos vendiendo nuestra basura.
Pongo en duda que esto sea un modelo de gestión válido, o que nos haga menos responsables.
Cada uno de nosotros, ciudadanos de las sociedades «modernas» está generando unos 550kg-600kg de esta basura al año, y el 40% puede llegar a ser plástico de usar y tirar.
¡Somos responsables de usar entre 150-300 bolsas plásticas al año por habitante!
Si nosotros no cambiamos, nada cambiará.
La globalización y esta cultura de usar y tirar hacen posible que por primera vez en la historia la sociedad humana pueda destruir un ecosistema tan fundamental como el mar con el mero hecho de que sus individuos se despierten por las mañanas y hagan su vida normal.
Son nuestros gestos cotidianos los que lo amenazan y destruyen, y lo más triste es que ni siquiera nos damos cuenta. Muy poca gente es consciente de esto, quizá siendo optimistas un 1% de la población del planeta.
El océano genera el 70% del oxígeno que respiramos, regula el clima con sus corrientes, atrapa el CO2 con el que crea arrecifes coralinos y a la larga piedra caliza, da de comer al 30% de la población del planeta directamente, es el lugar donde se originó la vida y donde habita la mayor cantidad de seres vivos del planeta.
En una sociedad super-informada, reina el desconocimiento de las realidades fundamentales, porque se ha perdido totalmente la relación con nuestro medio natural.
¿Negaremos a nuestros hijos y nietos el derecho a unos mares limpios?
Recuperemos esa relación, volvamos los ojos hacia las sociedades «nativas» que aún conservan este conocimiento ancestral. Bebamos de su sabiduría y hagámonos un poco más «indios». Es la única manera en la que podremos afrontar el gigantesco desastre natural que vamos a causar en unos pocos cientos de años.
Os invitamos conocer a otras asociaciones y organizaciones en nuestra sección colabora. También podéis seguir los artículos que algunas de ellas publican en el blog o seguirnos en Facebook, Twitter o Instagram. Además podéis formar parte de nuestro Salón de la Fama para lo que sólo tenéis que enviarnos vuestra foto recogiendo algo de la playa, seáis surfistas o no.
Surf ANd Clean es una asociación creada por surfistas para dar a conocer el grave problema que supone nuestra basura en el mar, también llamada basura marina.
